Para quienes padecen alergias respiratorias, la limpieza del hogar no es solo una cuestión estética: es una necesidad médica. El polvo doméstico, los ácaros, el moho o los pelos de animales pueden desencadenar síntomas que van desde los estornudos hasta crisis asmáticas. Y lo más preocupante es que muchos alérgenos se esconden justo en zonas que rara vez limpiamos a fondo. En este post te contamos qué espacios de la casa deben recibir una limpieza para alérgicos si tú o alguien en tu familia sufre de ellas. Además, te damos consejos prácticos para limpiar tu hogar y evitar alergias como un profesional, minimizando la exposición y mejorando la calidad del aire.

El dormitorio es el lugar donde pasamos más horas seguidas cada día, y también uno de los más críticos para quienes sufren alergias. Aquí se concentra la mayor cantidad de ácaros del polvo, sobre todo en:

  • Colchones de todo tipo: absorben sudor, células muertas y humedad, creando el hábitat perfecto para los ácaros. Aspíralos con filtro HEPA al menos una vez por semana.
  • Almohadas y edredones: aunque no se vean sucios, acumulan miles de partículas. Lávalos en lavadora a 60 °C cada 2 o 3 semanas.
  • Ropa de cama: cámbiala mínimo una vez a la semana. Usa fundas antiácaros si es necesario.
  • Cortinas y alfombras: si no puedes lavarlas con frecuencia, considera eliminarlas o sustituirlas por materiales lavables.
Limpieza a fondo para alérgicos

Salón y zonas comunes: cuidado con textiles y superficies blandas

Aunque pasemos menos horas en estas estancias, el salón y el comedor acumulan gran cantidad de polvo y alérgenos, especialmente si tienes sofás con tapizado, alfombras gruesas, mantas decorativas o cojines.

Para minimizar los síntomas:

  • Aspira sofás y cojines semanalmente, y límpialos con vapor seco si es posible.
  • Lava con frecuencia fundas, mantas y cortinas.
  • Reduce los objetos decorativos que acumulen polvo (peluches, jarrones, etc.).
  • Limpia a fondo los rincones difíciles: detrás del sofá, bajo los muebles, entre estanterías.

El uso de purificadores de aire con filtro HEPA en estas zonas puede marcar una gran diferencia.

Cocina: donde el moho y la humedad acechan

La cocina puede parecer un entorno más limpio porque se friega a diario, pero en realidad hay zonas donde la humedad y los restos orgánicos generan moho y bacterias invisibles, muy peligrosas para las personas con alergias o sensibilidad respiratoria.

Pon especial atención a la limpieza de cocinas y concretamente a las siguientes zonas:

  • Fugas bajo el fregadero o detrás de electrodomésticos.
  • Juntas de los azulejos y esquinas de la encimera, donde se acumula moho.
  • Campana extractora y filtros, que pueden acumular grasa y polvo.
  • Tuppers, tablas de cortar y escurreplatos, que deben limpiarse y secarse bien.

Cuarto de baño: limpieza antimoho en cada rincón

El baño es una zona crítica para personas con sensibilidad al moho, ya que la condensación y la humedad constante favorecen su aparición.

Te recomendamos:

  • Ventilar tras cada ducha y usar un deshumidificador si no hay buena ventilación natural.
  • Limpiar las juntas de la ducha o bañera con vinagre o producto antimoho.
  • Lavar alfombrillas y toallas con agua caliente.
  • Desinfectar el cepillo del váter, el escobillero y el bote del jabón con frecuencia.

Cuidado con las cortinas de ducha: si no son de material antifúngico, lávalas o sustitúyelas con regularidad.

Zonas ocultas: donde el polvo se esconde

Más allá de las habitaciones, hay zonas que casi nunca se limpian y son auténticos nidos de polvo y alérgenos:

  • Detrás de los electrodomésticos y radiadores.
  • Encima de armarios altos y puertas.
  • Rejillas de ventilación, filtros del aire acondicionado o calefacción.
  • Debajo de camas y sofás.

Estas áreas deben aspirarse o limpiarse con paños húmedos, para no levantar polvo. Una limpieza profunda cada cierto tiempo reduce drásticamente los brotes alérgicos.

¿Cada cuánto tiempo se debe hacer una limpieza para alérgicos?

Una limpieza cuando sufres de alergias debe ser constante y sistemática, especialmente en temporadas de alergias ambientales como primavera y otoño. Algunas recomendaciones generales:

  • Diariamente: ventilar todas las estancias y pasar un paño húmedo por superficies.
  • Semanalmente: aspirar colchones, alfombras, sofás y limpiar a fondo los suelos.
  • Mensualmente: limpieza profunda de baños, cocina y rincones ocultos.
  • Trimestralmente: limpieza general con tratamiento de vapor, antiácaros y antimoho.

Una buena rutina puede reducir hasta un 70 % los síntomas relacionados con el polvo y los alérgenos.

Limpieza para alérgicos

Calcula el precio de su limpieza a fondo de casas con alergias

¿Necesitas eliminar polvo, moho y alérgenos de tu hogar sin perder tiempo? En Limpiezas Express realizamos limpiezas profundas diseñadas para mejorar la salud respiratoria y la calidad del aire de tu casa. Puedes calcular en minutos el precio de una limpieza de casas para evitar alergias. Una solución rápida, profesional y eficaz para transformar tu hogar en un entorno más saludable.